martes, 1 de octubre de 2013

Comienza la aventura


De pronto un rincón cualquiera de la ciudad se convierte en el escenario de un remoto sueño.
Siempre he pensado que para ir lejos no hace falta ir muy lejos.
Basta abrir bien los ojos para que comience la aventura..

1 comentario:

  1. Al alero del tejado gateó previsor el humano monigote antes de la travesía. Oteó a fondo el cielo y lo encontró favorable. Pero al bajar resbaló y tuvo que emprender otro viaje.

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